
24 Ene Encuentros con lectores: Norberto Levy
Norberto Levy es médico psicoterapeuta y creador del concepto de “autoasistencia psicológica”. Hace algunos años llegó su libro “El asistente interior” a mis manos. Allí supe de él por primera vez y quedé maravillada con sus enseñanzas. A lo largo de los años continué leyendo hasta llegar a “Los diálogos interiores”, su último título. Tal fue el impacto que me provocó su lectura que lo mencioné en mi libro y me tomé el atrevimiento de aportar mi mirada apreciativa a su magnífico trabajo. Nunca imaginé que con los años pasaría por un proceso difícil de mi vida y sería él quien con su profesionalismo y calidez me ayudaría a transitarlo. Diego Enriquez, quién era cercano a él, me sugirió que fuera a verlo. Actualmente atiende sólo algunos pacientes, pero accedió a recibirme luego de la recomendación de Diego. Con el correr de las sesiones le conté de mi libro y de lo que había escrito sobre él y se sorprendió cuando lo escuchó, por lo que al siguiente encuentro le llevé un ejemplar de regalo. Recuerdo que estaba sentado en un pequeño banco y me agaché a su lado para leerle lo que había escrito. Cuando terminé le dije:
-Mientras escribía nunca hubiese pensado que algún día te lo leería en persona. Me miró con la amorosidad que lo caracteriza y continué:
-¿Qué te parece? ¿Crees que pude reflejar con mis palabras la calidad de tu trabajo? A lo que me respondió:
–Está perfecto, supiste transmitir muy bien la idea.
Me sentí feliz al escucharlo y me fui a casa con una agradable sensación de paz. Regresé a la semana y justo antes de irme Norberto apoyó su mano en mi hombro y me dijo que había estado leyendo mi libro. Frené mi paso, lo miré con un profundo agradecimiento y con un nudo en mi garganta. Él me sonrió y continuó:
-Celebro que escribieras tu libro, más allá de su contenido, creo que al mundo le hace muy bien una obra con este título. Eso ya es valioso en sí mismo.
Esta vez salí a la calle y caminé dos cuadras hasta mi auto con un profundo agradecimiento a la vida. El maestro a quien tanto respeto y admiro era quién hoy apoyaba su mano en mi hombro y me alentaba a seguir en este camino.